Aun en la vejez y las canas, oh DIOS, no me desampares; Hasta que anuncie tu poder a la posteridad, y tu potencia a todos los que han de venir. No me deseches en el tiempo de la vejes; cuando mi fuerza se acabare, no me desampares. Sea llena mi boca de tu alabanza, De tu gloria todo el dia .
Comentarios
Publicar un comentario